Hasta el salón del Concejo Municipal de Lota llegó ayer el presidente de Fesur, Víctor Lobos, para entregar detalles sobre lo que será la extensión del servicio de Biotrén a dicha comuna.
Lobos afirmó que luego de haber obtenido la rentabilidad social, que fue cifrada en 10,6%, el paso a seguir es realizar la ingeniería de detalle, es decir, determinar por dónde circulará el Biotrén, las características, costo y cómo van a ser sus estaciones. El proyecto contempla una estación en Playa Blanca y otra en el sector céntrico de Lota.
El alcalde de esta comuna, Mauricio Velázquez, reconoció la necesidad de contar con más estaciones que las propuestas. A juicio de la autoridad, se requiere otra en el sector de Bannen, que sería evaluada a futuro.
El seremi de Transportes, Jaime Aravena, aseguró que se tratará de un servicio alternativo y complementario a la locomoción colectiva. Se estima que 300 mil personas usarían el servicio por año.
Se espera que en 2023 esté en funcionamiento el nuevo servicio que implica una inversión de US$ 42 millones. Eso sí, según ha insistido Lobos, para poder llegar a Lota se necesita contar con el nuevo puente ferroviario sobre el río Bío Bío.