
Tener una mascota en casa es sumar un miembro más a la familia, y como tal se busca su bienestar y comodidad dentro del hogar.
Bajo este marco, es fundamental conocer de voz de especialistas cuáles son los cuidados y precauciones a tomar para que tanto perros y gatos puedan pasar una buena temporada invernal.
Para el académico de Medicina Veterinaria de la Universidad San Sebastián (USS), sede Concepción, Edson Montero, todo dependerá del tamaño de la mascota y su función. “Si los perros son pequeños y de casa, al igual que los gatos, estos pueden encontrarse dentro del hogar, idealmente nunca cerca de la fuente de calor, para evitar así cualquier cambio brusco de temperatura que podría condicionar la presentación de una enfermedad respiratoria”, explicó el especialista.
En la misma línea, Montero indicó que en el caso de “perros guardianes deben siempre tener acceso a un lugar resguardado y seco, que permita mantenerse en el exterior de manera protegida, sin embargo, debemos evitar las pozas de agua-lluvia que humedecerían los pulpejos y zona interdigital de la mascota para evitar la infección de hongos y bacterias”, detalló.
El director de Medicina Veterinaria de la Universidad Andrés Bello (Unab) Concepción-Talcahuano, Álvaro Opazo, añadió que también hay que considerar si la mascota es geriátrica o cachorro, ya que “puede que necesiten algún cuidado especial al poder presentar dificultades para regular su temperatura corporal si la ambiental es muy fría, para esos casos puntuales, hay ropa en las tiendas de mascota que podría ayudar, pero es necesario ir controlando la piel y pelaje por si apareciera alguna reacción adversa”.
El docente Unab, Álvaro Opazo, advirtió que cualquier contacto con una mascota, perro o gato, de día o de noche, si no se mantiene con sus vacunaciones al día y sobretodo con sus desparasitaciones, tanto internas como externas, llevará a las personas de su entorno a estar en riesgo de contraer alguna zoonosis o enfermedad transmitida por animales.
“Es importante recalcar que las pulgas y garrapatas pueden ser portadores de microorganismos patógenos infecciosos que nosotros podemos contraer, así mismo, con parásitos intestinales que podemos contraer si las mascota nos lame y ella lamió su zona anal teniendo algún endoparásito en la boca”, sostuvo el director de carrera.
A su vez, el especialista de la USS, Edson Montero, agregó que “si el perrito o gatito tiene su control sanitario al día (vacunas, antiparasitarios, higiene corporal, etc.) puede dormir a lo más dentro de la habitación, pero no en la cama. Esto más que nada por las implicancias etológicas de la mascota que puede dificultar a futuro la convivencia debido a un deterioro en el comportamiento para con la familia”, precisó.
“Como información general, alrededor del 67% de las enfermedades que afectan al hombre tienen origen en los animales, por tanto, cualquier medida que sea de prevención en las mascotas, es también seguridad para nosotros”, alertó Opazo.
La médico veterinario de Ezootic Pet, Paulina Moreno, explicó que “es súper importante, como ahora se da mucho que las mascotas viven dentro de las casas, más allá de la época, la desparasitación interna como externa. A la gente se le olvida y al final terminan con patologías. En algunos lugares del país se da mucho la parasitosis en los niños, la razón es porque tiene mayor contacto con las mascotas y no se lavan las manos, concretándose el contagio”.
Además, Moreno añadió que “En Chile no hay ninguna cepa de virus que afecte tanto respiratoriamente como sistémicamente al hombre y a la mascota. En algunos casos, las mayores complicaciones son los gatitos para la gente asmática, por la fecha, generalmente uno se calefacciona más, los gatitos están al lado de la estufa, eso termina con reacciones más complicadas para quienes tienen problemas asmáticos, pero es un tema más puntual”.
Una inquietud que suelen tener los responsables de mascotas es si cambiar la dieta que está llevando el animal durante la temporada otoño-invierno. Ante esta duda, Montero sugiere que en general no debería cambiarse la dieta a aquellos que conviven con la familia dentro de la casa. Esto a diferencia de aquellos que están en el exterior y sobre todo a los que cumplen un trabajo de resguardo de la propiedad, “a ellos, se les debe proveer un alimento Premium de alta calidad, que sea concordante con la edad de la mascota, la carga de trabajo y las temperaturas exteriores habituales del periodo invernal, pudiendo modificar el tamaño de la ración de acuerdo a las instrucciones de su médico veterinario”, aseveró.
Por su parte, Opazo indicó que no existe una recomendación particular para estas fechas, no obstante, advirtió que en invierno el organismo debe generar más temperatura para compensar las ambientales, “eso significa mayor gasto energético y se traduce, en que pueda requerir mayor cantidad de alimento. De no hacerlo por esa vía, la obtendrá de su musculatura o grasa, llevando a bajar de peso que podría ser perjudicial para su salud, sobre todo si vive en la intemperie y se registran temperaturas más extremas (bajas)”, explicó el especialista.
“En una condición fisiológica, no patológica, el alimento se elige en función del tamaño de la mascota, la edad, si se encuentra gestando la hembra, en crecimiento, etc. Existe una variada oferta de tipos de alimentos como calidades en el mercado, por lo que la sugerencia es consultar con su veterinario para ajustar la dieta de su mascota en particular”, afirmó Opazo.
Edson Montero, de la USS, sugirió bañar a las mascotas que viven dentro de casa de acuerdo al régimen dado por el médico veterinario, por lo tanto, de ninguna manera realizarlo todos los días ni de forma muy frecuente, ya que “eso produce el lavado de ciertas secreciones lipofílicas protectoras naturales de la piel de nuestra mascota, lo que lo hace más proclive a infecciones dermatológicas”.
“Use siempre los productos recomendados de acuerdo a las características individuales de su mascota. Las mascotas que se encuentran en el exterior solo se deberían bañar en casos excepcionales, para evitar que los compuestos naturales de la piel que actúan como repelente al agua, constituyan un factor de coadyuvante a las infecciones dermatológicas y respiratorias”, añadió Montero.
Asimismo, Opazo advirtió que “lo más delicado son los cambios de temperatura a los cuales podríamos someter a la mascota, de un baño con agua tibia – caliente y luego sacarlo al patio para secarlo en ese lugar, sería una situación de alto riesgo”.
“Del corte de pelo, lo fundamental es que sea realizado respetando su raza y pelaje de la mascota, si el perro es de pelo largo, no deberíamos cortarle el pelo, en una condición normal, porque eso puede ocasionar un desbalance en la epidermis y dermis, tanto en temperaturas bajas como altas”, mencionó el médico veterinario.
Los especialistas coinciden en que los pequeños miembros de la familia deben evitar los cambios bruscos de temperatura, usar ropa de protección al salir al exterior, evitar que se mantengan en forma directa a fuentes de calor, mantener un pulcro aseo en sus pertenencias, además de secar los pulpejos y la zona interdigital cada vez que salen al exterior.