Las movilizaciones feministas, la gira por China, el trabajo de la Comisión Centenario, el asentamiento en el Cruch, las gestiones en el marco del proyecto del Parque Científico y, recientemente, la solicitud de reconocimiento del rol público universitario.

Todos los anteriores son hitos de los primeros cien días del rector Carlos Saavedra al frente de la Universidad de Concepción. Y pese a la publicidad de cada uno, el titular de la casa de estudios penquista prefiere quedarse, en su balance personal, con los esfuerzos modernizadores de la gestión universitaria.

“Es algo silencioso, pero que impacta en la vida diaria de la comunidad”, afirma Saavedra a la hora de sacar cuentas. Y en cuanto al desempeño del equipo conformado, dice, existe “satisfacción plena”.

– Las movilizaciones por una educación con perspectiva de género irrumpieron al inicio de su agenda. ¿Cómo impactó en el plan de Gobierno?

– Yo diría que nos obligó a redoblar esfuerzos, a afiatar el trabajo en equipo, así es que efectivamente equivale a poner esfuerzos personales e institucionales mayores en un tema, que si bien estaba considerado  -avanzar en condiciones de equidad de género y diversidad-, nos hizo incorporar otros elementos con mayor celeridad en una primera etapa.

– ¿Qué destacaría de los primeros cien días?

– Destacaría aquello que no se ve. El trabajo de preparación de proyectos de modernización de gestión universitaria. En paralelo, todos los proyectos que se conocen, pero también desafíos en el ámbito de la investigación asociativa, así que las noticias van y los avances son en distintos planos.

– Modernizar es un objetivo a largo plazo.

– La modernización de gestión y modernización en procesos universitarios, son cambios culturales. Nosotros asumimos que esto va a tardar y, probablemente, más allá de un proceso de conducción. Estamos avanzando gradualmente, hay que incorporar elementos de modernización de gestión orientados a los estudiantes, procesos de gestión financiera. Este es un cambio en una multiplicidad de ámbitos que nos permite visibilizar efectos en el largo plazo al interior de nuestra universidad.

– ¿La modernización pasa por la reforma estatutaria que anunció en campaña?

– Está la reforma estatutaria en nuestro proyecto, con la urgencia que corresponde. La reforma estatutaria requiere de dos tercios, entonces tiene desafíos que son mayores. Eso en el estado actual, equivale a más personas de las que participaron en la última junta de socios. Además, no podemos estar haciendo reformas estatutarias cada vez y, por lo tanto, haremos una única propuesta integral que nos faculte a hacer las adecuaciones estatutarias que permitan modernizar la gestión universitaria.

– ¿Se busca decididamente consagrar una mayor incidencia de la UdeC en el debate público?

– Tal como lo planteamos durante el proceso de campaña y en este tiempo, queremos que la universidad recobre una mayor presencia pública en los distintos ámbitos. Estar presente en los planteamientos de fondo en temas de descentralización y la búsqueda de transferencia efectiva de competencias y recursos para el desarrollo de la Región, va a ser un discurso permanente durante este período de Rectoría, porque nos parece sumamente necesario ir cambiando los paradigmas de desarrollo nacional. Parte de los retrasos que existen en regiones tienen que ver con esa falta de compromiso con el desarrollo. Va a ser parte del discurso, pero también parte de las estrategias generales de posicionamiento universitario.

– En ese sentido, que el Estado reconozca el rol público de la UdeC es prioridad.

– Tenemos que trabajar con las otras universidades involucradas en el tema, pero es parte del reconocimiento histórico de nuestra universidad.