Una colorida escalera, música en vivo y un conversatorio sobre cómo los penquistas quieren su ciudad fueron parte de la puesta en escena que la seremi de Vivienda y Urbanismo realizó en la llamada Escalera de la Paz, que conecta calle Chacabuco con Lo Aguilera y el Barrio Universitario.
El seremi de Vivienda y Urbanismo, Jaime Arévalo, afirmó que las intervenciones realizadas en el sector son parte del concepto de Biociudades, que se ha impulsado como estrategia de acercamiento con la comunidad, buscando poner en valor la identidad y pertinencia cultural en el desarrollo de las ciudades de la Región.
“Es así como este año buscamos desarrollar una iniciativa que permita visibilizar y mejorar un espacio público de la ciudad como la Escalera de la Paz. El trabajo que realizamos, que se sustenta en más de 700 encuestas realizadas a penquistas, incluye un mural, mejorar las áreas verdes y un acompañamiento musical”.
El seremi destacó que la encuesta reveló el que la comunidad desea participar de los cambios de la ciudad, preservar los espacios patrimoniales poniéndolos en valor y realizar intervenciones que, en general, no requieren una inversión muy alta – en ese caso no supera el millón y medio de pesos- pero que logran hacer un cambio en distintos lugares como la Escalera de la Paz, que durante años fue considerada como un lunar de la zona.
Arévalo expresó que la intervención de la escalera está relacionada con la idea de contar con ciudades a escala intermedia que son recorribles a pie.
Además dentro del programa de Biociudades hoy, de 10 a 14 horas, en las dependencias de la Seremi estará presente la muestra de las alfareras de Quinchamalí que fue presentada en el China Week y luego será trasladada hasta el 2 de enero en la Intendencia y de ahí en adelante en Artistas del Acero.
Durante la segunda quincena de enero Biociudades entregará los primeros resultados obtenidos en el Observatorio Urbano creado por la Seremi de Vivienda.