Lota despidió con globos y lágrimas a joven fallecido en aluvión de Chaitén

20 de Diciembre 2017 | Publicado por: Carolina Abello
Fotografía: Carolina Echagüe M.

Era padrino del hijo de su mejor amigo y estaba a punto de asumir el mismo rol con su sobrina, “pero ya no va a poder ser”, dijo Valery, su única hermana.

La entrada del pasaje Los Lagos, en la Población Cantera 2, en Lota, está decorada con globos blancos y lienzos con pasajes religiosos. Al fondo, en la casa 23, la familia y sus amigos velaban el cuerpo de Guillermo Cerda Bizama (18), el joven  que se convirtió en una de las 13 víctimas del aluvión que el sábado pasado sepultó parte de la Villa Santa Lucía, en Los Lagos, donde había ido a visitar a su padre, quien lleva su mismo nombre.

Su madre, Corina Bizama, no estaba en condiciones de hablar, por lo que fue su única hermana, Valery Cerda (26), quien contó que Guillermo decidió ir a ver a su papá, quien llevaba dos meses trabajando en Chaitén. Se había comprado una cámara fotográfica profesional, que  pretendía estrenar en los paisajes del sur, donde su padre trabajaba en la construcción de la carretera Austral. Pretendía quedarse una semana, pues  regresaría a hacer su práctica profesional en Asmar, tras terminar sus estudios en el Liceo Industrial Metodista de Coronel.

“Mi papá salió a trabajar 20 minutos antes de que llegara el aluvión. Mi hermano se fue durmiendo, no sintió nada, tiene su carita igual que siempre”.

La joven contó que el 10 de enero su hija Dara Emilia celebraba su   primer  cumpleaños. Ahí sería bautizada y el padrino iba a ser Guillermo, “pero ya no alcanzamos, no va a poder ser”.

También agradeció el apoyo del municipio, ya que ellos gestionaron el terreno para sepultarlo en el cementerio de la comuna, ya que la familia no contaba con uno.

“Mi hermano era mucho más maduro para pensar que yo, aunque teníamos ocho años de diferencia nos llevábamos súper bien. Él me contenía cuando yo estaba mal, o cuando discutía con mi esposo. Él era mi refugio, pero yo le decía mi hijo, porque me tocó criarlo, cuando mi mamá trabajó. Éramos dos hermanos, pero ahora quedé solita”.

Mi hermano,  mi compadre

Darien Bugueño García es el mejor amigo de Guillermo, a quien llama su hermano. Viajó desde Antofagasta para estar con él en su despedida.

“Hablé con él antes del accidente y me contaba que andaba paseando allá y estrenando cámara, y como yo me casé hace poco le decía que le iba a mandar el video de mi boda y quería que fuera a verme.   Y al día siguiente vi lo del aluvión en las noticias y en la tarde me dijeron que Guillermo estaba desaparecido. Todos me decían que él tenía que estar bien, y que seguramente estaba ayudando a la gente”.

Pero el domingo en la mañana se acabó la esperanza, pues le confirmaron que Guillermo había fallecido en la tragedia.

“Yo me puse a llorar y le dije a mi mamá que quería venir a ver a mi hermano”. Así que se subió al bus a las 13 horas del domingo y llegó a Lota a las 16 horas del lunes.

Su amistad partió en segundo básico, en la escuela Getsemaní en Lota. Pese a que la enseñanza media los separó un tiempo, luego se reunieron en el Industrial Metodista.

En Antofagasta trabajaba como constructor metálico, igual que Guillermo. Su vínculo se estrechó aún más cuando el joven fue escogido como el padrino de Mateo Isaac, de dos años y medio, el primer hijo de Darien.

“Mi compadre no quería al principio, porque me dijo: pero hombre, yo no estoy trabajando, cómo los voy a ayudar. Pero yo le dije que no quería plata, sino que él fuera el padrino. Y me dijo que no quería plata de sus papás, así que hizo pololitos por aquí y por allá, se esforzó tanto el hombre para comprarle la torta a mi hijo. De hecho, él me motivaba a buscar trabajos para mantener a mi familia. Me ayudó a madurar y a sacarlos adelante”.

En la puerta de la casa está su abuelo Segundo Cerda, quien tiene  15 nietos y 4 bisnietos. Recuerda con sus parientes a su nieto. “Era muy bueno, honrado, buen alumno,  los tenemos a todos muy bien enseñados. Era bueno para dormir, de sueño pesado, y al final eso lo perjudicó”, finalizó.