El viernes 24 habrá una asamblea clave de los copropietarios, en la que se decidirán los próximos pasos para su reparación.

El próximo viernes 24, se realizará una asamblea clave de los copropietarios del edificio Plaza del Río, quienes, tras 7 años de ocurrido el terremoto de 2010, aún no logran llegar a consensos que permitan la reconstrucción de la torre A.

En 2014, se resolvió parte del problema, cuando un acuerdo logró poner fin al conflicto entre 99 ex residentes del edificio Plaza del Río y la inmobiliaria Levante, quienes habían interpuesto acciones penales y civiles tras el colapso del edificio debido al terremoto de febrero de 2010.

El acuerdo contempló el pago de mil 500 millones de pesos para los afectados, a cambio de sus derechos en los departamentos. Además, se firmó el compromiso de reconstruir la torre B de la estructura ubicada en calle Salas 1343. La torre A fue demolida tras el mega sismo.

Sin embargo, un grupo de 24 ex vecinos del edificio decidió no demandar o se restaron del acuerdo judicial, y optaron por no ceder sus derechos de propiedad y esperar que la inmobiliaria reparara sus departamentos.

A poco más de dos años, la torre B aún no es reconstruida, ya que se ha dificultado llegar a consensos entre la empresa y los ex residentes. Por eso, Levante contrató al abogado Juan Silva Correa, como presidente del comité de administración de la comunidad del edificio Plaza del Río, para favorecer la cercanía entre ambas partes.

Acuerdos pendientes

El profesional explicó que durante el año han realizado varias asambleas y durante el año han trabajado para explicarles a los copropietarios todo lo que significa reconstruir la torre. “Hemos logrado converger en los aspectos legales que se tienen que seguir para desafectar y vender el terreno donde estaba ubicada la torre A”, precisó, ya que al vender el paño consiguen financiamiento para la obra.

Esto, porque además entre la inmobiliaria y los 24 copropietarios que quedan afrontarán los gastos de reparación, que ascienden a mil 500 millones de pesos. Es decir, cada uno tendría que pagar entre 12 y 20 millones de pesos. Pasada esta etapa la inmobiliaria llamará a licitación para reconstruir la torre.

Así, en la asamblea se votará la desafectación del terreno, los porcentajes de cada propietario en la subdivisión y la postulación del proyecto a la Dirección de Obras Municipales, que tiene que aprobar lo que se haga en el sitio.

Más aún, considerando que tras el megasismo, el edificio sufrió destrozos, robos y fue ocupado por indigentes. Quedó a cargo de los copropietarios, hasta que finalmente, en 2014, la inmobiliaria asumió la custodia del lugar, y la primera medida que de sacar a toda la gente que estaba allí viviendo de forma ilegal. Contrató una empresa con guardias , para que no hubiera más robos y destrozos.

Así, ahora sólo se espera el resultado de la asamblea para lograr que se reconstruya el edificio, que ya se ha transformado en uno de los pocos recordatorios en Concepción de lo ocurrido en el 27-F.