La Defensoría Penal Pública interpuso un recurso de amparo en favor de los menores, quienes denunciaron haber sido golpeados tras el intento de suicidio del 15 de octubre.
El pasado 15 de octubre, un grupo de ocho adolescentes privados de libertad en el Centro de Internación Provisoria y Régimen Cerrado del Sename, terminaron en el hospital San José de Coronel, tras ingerir pastillas e intentar autoagredirse de diversas formas.
El hecho causó la llegada de autoridades de Santiago, quienes de a poco están implementando medidas para mejorar las condiciones de vida de los 70 jóvenes que viven en el recinto.
Sin embargo, eso no era todo, pues a través de un recurso de amparo, la Defensoría denunció ante la Corte de Apelaciones que Gendarmería ingresó a la casa 9 del recinto, una vez que el grupo había regresado del recinto asistencial, y estando aún engrillados y esposados, “fueron golpeados con pies, puños y bastones. Además se les arrojó gas pimienta en la cara y fueron amenazados por los funcionarios”, dice el recurso. Los adolescentes señalan que esto fue observado por algunos educadores de trato directo, quienes no hicieron nada para detener la golpiza.
En el recurso, el defensor juvenil Eduardo Rosado especifica que recibió las denuncias en la visita que hizo a los adolescentes dos días después de lo ocurrido.
En cuanto al recurso, especifica que es en contra del jefe del destacamento, teniente Jhon Cruz, y solicita que se declare la ilegalidad de estos apremios, y que se ordene a Gendarmería abstenerse de aplicar violencia o malos tratos a los internos, y que adecue sus protocolos a las leyes vigentes. Además, se solicita que se instruya un sumario interno para dilucidar responsabilidades y que estos actos se repitan, y que todos los antecedentes se remitan al Ministerio Público.
El defensor regional, Osvaldo Pizarro, explicó que en este caso hubo tres adolescentes que denunciaron lo que ocurrió el 15 de octubre. “Hecho que también se puso en conocimiento de los profesores de la Fundación Tierra de Esperanza, que tengo entendido que también interpuso una denuncia”.
El abogado precisó que esto infringe los tratados internacionales, particularmente de la Convención de los Derechos del Niño, porque se está imposibilitado de someterlos a algún tipo de medida disciplinaria que constituya un trato denigrante, inhumano, o castigo corporal a los adolescentes. Esto habría sido una represalia por el comportamiento que ellos tuvieron en la mañana con estos intentos de suicidio”.
Osvaldo Pizarro agregó que ya habían denunciado el excesivo ingreso de Gendarmería al recinto, casi diariamente, lo que por ley tampoco debiera ocurrir.
“Lo que ocurrió ese día fue con violencia que no era ni racional ni necesaria, por lo que esta situación es más grave todavía”.
Agregó que en la visita que realizó al centro, en el contexto de la visita de la jefa de Justicia Juvenil del Sename, se solicitó que se evitara el ingreso desmedido de Gendarmería, “y que sean los educadores de Sename los encargados de controlar este tipo de situaciones”.
Respuesta de Sename
Mediante un comunicado, la Dirección Regional del Sename precisó que se entregará toda la colaboración necesaria para la investigación de los hechos denunciados por los jóvenes.
Agregó que los antecedentes de estos nuevos hechos denunciados, “han sido incorporados al proceso del sumario administrativo que investiga las autoagresiones de los jóvenes”.
El escrito finaliza precisando que “Sename constantemente está reforzando con sus funcionarios, como con las instituciones externas que trabajan en el Centro de Justicia Juvenil de Coronel, que se deben denunciar de manera oportuna y formal cualquier situación que afecte los derechos de los jóvenes que son atendidos”.