Jornada de reflexión sobre violencia y convivencia escolar analizó la situación a nivel local y de Chile en el contexto sudamericano. País tiene altos indicadores de percepción de violencia.

Cerca del 60% de los estudiantes de segundo medio percibe que no hay buenas relaciones entre los distintos actores que intervienen en el proceso educativo, según el último Simce aplicado a alumnos de segundo medio. Una percepción peligrosa que pone en evidencia el clima de conflicto que enfrentan hoy los establecimientos educacionales en la Región del Bío Bío y, en general, en todo el país.

Una realidad que ayer analizaron representantes de la Cepal en Chile, del Ministerio de Educación, en específico de la Agencia de Calidad de la Educación y de la Universidad de Concepción.

Esto, porque además, un reciente estudio de la Cepal muestra altos niveles de percepción de violencia escolar en nuestro país. Y si bien en la óptica de niños y niñas la cifra es más optimista que el promedio latinoamericano, en la percepción de los adultos es más alta, al punto que casi la mitad de los docentes declara haber sido testigo de amenazas e insultos. “En cuanto a la relación que existe entre las violencias y rendimiento escolar Chile es de los países que tienen mayor asociación entre ambos factores”, explica Daniela Trucco, oficial de asuntos sociales de la División de Desarrollo Social de la Cepal.

Foco en la convivencia

El director de la Agencia de Calidad de la Educación en la Macrozona Centro Sur, Gino Cortez, agrega que es precisamente el clima de convivencia escolar una de las variables que más influye en los aprendizajes de los estudiantes.

“Convivencia escolar se divide en ambiente de respeto, ambiente organizado y ambiente seguro y dentro de esas tres la que tiene mayor significancia es la de respeto. Aquellos establecimientos que logran establecer las relaciones de respeto logran mejores aprendizajes… Muchas veces nos preocupamos más de lenguaje y de matemáticas que de estas variables”, reconoce el encargado.

A nivel regional admite Cortez, los esfuerzos del sistema de aseguramiento, que incluye al ministerio y la superintendencia de Educación se ha concentrado fundamentalmente en el 5% de los establecimientos del Bío Bío, que son los que han obtenido una evaluación insuficiente en materia de convivencia escolar. “Es ahí donde las tres instituciones nos hemos enfocado en el trabajo y estamos intentado que puedan desplegar sus mayores potenciales”, manifestó, agregando que la decisión se basa en los niveles de vulnerabilidad, ruralidad y aislamiento.

La representante de la Cepal, agregó que Chile enfrentará, además un nuevo desafío en términos de inclusión de los inmigrantes. Y es que entre quienes perciben más violencia están los inmigrantes, los niños en situación de trabajo infantil, los estudiantes de escuelas públicas y de áreas urbanas, entre otros.

Trucco explica que la política pública ha fallado en términos de visualizar la violencia como única y llevándola sólo al aspecto del Bullying y al dejar fuera las distintas relaciones que se dan en el contexto de los establecimientos.

Un aspecto, que, argumenta debe ser abordado también desde la formación docente.

En este sentido, Oscar Nail, decano de la facultad de Educación de la Universidad de Concepción argumenta que es clave enfrentar el tema desde la formación continua y que “como todos los temas de inclusión que hoy día son parte de la agenda social y nacional deben incorporarse en una formación complementaria”.