Es la empresa colombiana Servitrans la que ahora será responsable. Un dato: la municipalidad pagará $14 millones más que hasta ayer, pero con menos camiones.
 

Javier Ochoa Provoste
javier.ochoa@diarioconcepcion.cl

Tras la verdadera telenovela en que se transformó la última licitación del servicio de aseo de la ciudad de Concepción, donde hubo declaraciones desiertas, licitaciones cortas y más que alguna polémica entre los miembros del Consejo Municipal y la propia alcaldía, finalmente hubo un ganador: la empresa colombiana Servitrans, que estará a cargo del servicio por los próximos siete años, proceso que partió hoy a las 00.00 horas.

Ahora bien, hay un dato no menor y que fue parte importante de la polémica pre adjudicación: la municipalidad terminó pagando $291 millones mensuales a Servitrans por los próximos siete años, $14 millones más de lo que pagaba, hasta ayer, a la empresa Dimensión ($277 millones), pero con la diferencia que esta última prestaba el servicio con mayor logística, en especial lo referido al número de camiones recolectores (18, versus los 13 de Servitrans) y 118 barredores. Sin embargo, desde la municipalidad informaron que todos los camiones son del año 2017 y con caja compactadora certificada, destacando que otro cambio importante es que su base de operaciones está fuera de sectores residenciales. Asimismo, dejaron ver que existen los mecanismos para que en caso que se detecte algún incumplimiento, presionar a la empresa para que corrija una situación.

Pese a lo anterior, no es menos cierto que la base de operaciones que poseía Dimensión tiene autorización sanitaria por parte de la Seremi de Salud, lo que no ocurre con la actual de Servitrans, pese a que esté fuera del radio urbano.

Nuevo servicio

Según se indicó, habrá servicios tres veces a la semana en el sector rural y en el sector céntrico 14 puntos de acopio para los residuos sólidos domiciliarios con 14 contenedores cada punto, totalizando 196 depósitos que ayudarán a que el servicio en esta zona de la ciudad sea más eficiente, sobre todo si consideramos que se destinarán 2 camiones recolectores exclusivos para el centro y que se aumentará el área de operación de este cuadrante (Carrera – Chacabuco – Angol – Orompello), incrementando para ello el número de barredores.

Por la puerta ancha

Cosultado el gerente general de la empresa saliente, Dimensión, Víctor Amado, este fue claro al señalar que hicieron todos los esfuerzos para entregar todo en orden a la nueva empresa, "ya que nos interesa que les vaya bien", apuntó, explicado que buscaron "salir por la puerta ancha".

"Sí nos interesa que la gente sepa que estuvimos 9 años limpiando la ciudad sin ningún tipo de inconvenientes como alguna alerta sanitaria ni nada parecido. Incluso para el terremoto sacamos los camiones a la calle y trajimos apoyo desde otras ciudades, ya que somos una empresa con diez años de experiencia a nivel nacional".

Amado también destacó que siempre tuvieron buenas relaciones con sus trabajadores, a los cuales se les pagará el finiquito y sueldo divididos por categoría de trabajador, "de manera de no entorpecer el trabajo de la nueva empresa que mantuvo a un gran porcentaje de nuestros empleados", comentó, dejando entrever que dejan la comuna con un alto estándar que obligará a Servitrans a estar a la altura de una ciudad grande como es Concepción.

El ejecutivo de Dimensión enfatizó que les interesa puntualizar en forma muy clara y transparente la forma en que están dejando los servicios y la propia ciudad, de manera que ante cualquier situación futura no los hagan responsable.

"Si hay algún tipo de discordia con el municipio, o problemas de interpretación en algún aspecto, que lo dejen por escrito para poder ser abordado, posteriormente, por los fiscales correspondientes de ambas partes. Pero en términos de servicio, queremos que la municipalidad y la comunidad sepan que entregamos todo como corresponde".

Víctor Amado recordó el problema cuando vaciaron camiones a las afueras del municipio (julio 2015), pero fue claro al señalar que eso se debió a una decisión de los trabajadores movilizados a nivel nacional, acto que de ninguna manera fue apoyado por la empresa, la que tuvo que, igualmente, pagar una millonaria multa, injustamente cobrada, estimó Amado. 

En lo actual, a esta hora ya está operando Servitrans, y serán los propios vecinos quienes juzgarán la calidad del actual servicio por los próximos siete años, versus lo que tenían antes, y quedará claro si valió la pena pagar los $14 millones mensuales más que el anterior contrato que caducó ayer a las 22.00 horas.