La actividad incluyó muestra fotográfica y audiovisual sobre el patrimonio de Concepción, espectáculos con músicos de la zona y una feria compuesta por seis stands de diversas organizaciones sociales.
 

Como una forma de visibilizar y darle valor al patrimonio industrial del Gran Concepción, se llevó a cabo el evento recreativo y cultural "Revive la Fábrica", frente a la ex Fábrica de Paños Bío Bío, instancia organizada por Patrimonio Industrial Bío Bío, en colaboración con la Municipalidad de Concepción a través del Fondo de Apoyo a Iniciativas Culturales Comunales.

Seis stands recibían a los visitantes, ofreciendo una vasta colección de objetos históricos. Desde fotografías, revistas hasta todo tipo de herramientas de trabajo utilizados en las fábricas eran parte de la exposición. 

Alejandro Valenzuela López, de la organización Patrimonio Industrial Bío Bío, se refirió a la necesidad de mantener vivo el patrimonio ligado a la actividad industrial. "Muchas de las localidades que constituyen la provincia de Concepción se configuraron en torno a los asentamientos industriales y hoy estos lugares están desapareciendo muy rápido, borrando una parte de nuestra historia como territorio", recalcó.

La organización se constituyó a comienzos del 2016 y busca proteger, visibilizar y difundir el patrimonio que se desarrollo en la provincia de Concepción desde el siglo XIX a la actualidad. 

El director del Centro Artístico y Cultural de la Municipalidad de Concepción, Sebastián Torres Macaya, destacó que "el patrimonio industrial es una de las patas del desarrollo cultural de la ciudad. De esta forma, se busca darle un valor hoy para así construir un patrimonio hacia el futuro". 

Lota es una de las comunas que posee mayor centros turísticos. Con el circuito Lota Sorprendente han contribuido a retomar el valor cultural y patrimonial de la comuna minera. Hace ocho años la Mesa Ciudadana de Patrimonio, Cultura y Turismo de la comuna han participado en las diversas actividades que van en pos de difundir el valor patrimonial arraigados en los piques mineros. Su presidente, Justo Espinoza Montanare hace un llamado a las autoridades a ayudar a mantener estos espacios históricos. "En Lota tenemos muchos lugares que mostrar a la comunidad, pero es necesario realizar la mantención. No basta con tener el título de Monumentos Nacionales si éstos están abandonados. 

La Fábrica de Paños Bellavista fue una de las industrias más importantes de la Región entre los 60’ y 70’, hoy a través del programa Quiero mi Barrio se busca recuperar el espacio donde están ubicadas 500 viviendas que se forjaron alrededor de dicha fábrica. 

"Nosotros además de darle vida a este sector importante de Tomé, también estamos recuperando el sindicato que es un equipamiento patrimonial de relevancia para los vecinos", detalló Bárbara Rojas Mello, encargada Urbana del programa. 

La comuna de Penco ha izado la bandera de "Ciudad Histórica". Las antiguas revistas y utensilios de la emblemática refinería de azúcar Crav y Fanaloza fueron unas de los tantos objetos de colección que Mario Fuentealba González tenía a disposición y deleite de los invitados. "En los años 70 comencé a coleccionar cosas. Tengo alrededor de 100 piezas, las que permiten dar vida a una época histórica", contó el presidente de la Junta de Vecinos de Villa Los Rabales de la comuna.

Patrimonio intangible

Otro de los stand era el perteneciente a la Junta de Vecinos de la Aurora de Chile. Con fotografías que plasmaban la historia de la emblemática población. "Con casi 100 de historia consideramos que somos patrimonio viviente de la ciudad de Concepción. No sólo se trata de infraestructura, también de historia", señaló la presidenta de la junta de vecinos, Priscila Hernández.

Al igual que el trabajo en conjunto realizado con la Aurora de Chile, la municipalidad de Concepción trabaja con cinco poblaciones insignes penquistas; Lorenzo Arenas, Palomares, Nonguén, Pedro del Río y Agüita de la Perdiz.

A un costado del escenario, donde más tarde se presentaron artistas de la zona, se encontraba, Walter Marcelo Blas, tomando fotografías estenopeicas. Lo llamativa de "la colorina", nombre con el que bautizó a la cámara, hacía que a cada minuto se les acercarán curiosos tanto para retratarse como para conocer su funcionamiento. 

"Este tipo de fotografías tienen la cualidad de ser únicas. Con las digitales tienes miles de copias. El retomar este tipo de fotos es también retomar la historia", finalizó.

Con este tipo de iniciativas se busca cambiar la postal de infraestructura vacía, a la cual se ha convertido las ex fábricas industriales, por una viva digna de respetar y recuperar.