Ante los altos índices de obesidad en el país, el Dr. Fernando Carrasco presentó esta nueva propuesta farmacológica que llegaría como una alternativa para complementar los tratamientos médicos.
Ante los altos índices de obesidad en el país, el Dr. Fernando Carrasco presentó esta nueva propuesta farmacológica que llegaría como una alternativa para complementar los tratamientos médicos.
Sebastián Flores
Contacto@diarioconcepcion.cl
Uno de los principales hechos que marcó al país y especialmente a la Región del Bío Bío este año en términos de salud son los elevados índices de obesidad que reveló el Examen de Medicina Preventiva, el cual toda persona puede realizarse de forma voluntaria a partir de los cuatro años de edad.
Según las cifras entregadas por el Ministerio de Salud, Concepción presenta un 93% de las personas examinadas con problemas de sobrepeso, es decir, un índice de masa corporal superior a 30.
Bajo este contexto llegó a Concepción el Médico Cirujano y especialista en nutrición de la Universidad de Chile, Dr. Fernando Carrasco, para participar de la charla "Actualización en obesidad, aspectos generales. ¿Qué hay de nuevo?" auspiciada por el laboratorio Synthon Chile.
"La charla busca poner al día el tratamiento especialmente farmacológico de la obesidad", explica el doctor. Este medicamento llegaría a posicionarse como una ayuda complementaria a los tratamientos del sistema de salud.
El fármaco, según el médico, sería novedad a nivel nacional en temas de salud y control de sobrepeso en adultos.
El tratamiento
Lorcaserina es el nombre del nuevo fármaco que el Dr. Fernando Carrasco dio a conocer en su visita a la ciudad y que fue presentado ante un grupo de médicos provenientes de las principales ciudades de la zona centro-sur.
El especialista en nutrición cree que el objetivo de la charla es dar cuenta de que un tratamiento farmacológico siempre será una ayuda que se haga de manera segura y efectiva en pacientes con indicación. En este sentido sería necesario cambiar la visión de los médicos que, por lo general, son reacios al uso de fármacos.
Para Carrasco, en los médicos existe "una tendencia a pensar que la obesidad es una enfermedad de culpa exclusiva del paciente y que por lo tanto es él quien debería saber resolverla por sí solo", dejando de lado factores psicológicos y biológicos.
Explica que Lorcaserina se debe entender como una ayuda al tratamiento y no como un reemplazo de los cambios conductuales de ejercicio y alimentación.
El medicamento, agrega, tiene su efecto sobre el paciente "ayudándole a reducir el apetito y la ansiedad, complementando esto con los cambios conductuales que la persona podrá implementar en su rutina diaria".
Uno de los principales temores en cuanto a la implementación de este fármaco, tanto en pacientes como en médicos, son los efectos que se puedan llegar a generar en las personas una vez que se corta el suministro.
"El mensaje es explicarle a los médicos porque esto no se produciría si el remedio es bien administrado en un paciente bien seleccionado y con un posterior seguimiento", explica el Dr. Fernando Carrasco.
Agrega que el efecto rebote se produce con medicamentos que inhiben fuertemente el apetito y que a la larga no significan un esfuerzo del paciente. Al contrario, con Lorcaserin se lograría un tratamiento íntegro en donde se vean los cambios conductuales acompañados de un medicamento de apoyo.
De esta forma, toma gran relevancia que el paciente tenga una constancia durante y después del tratamiento, lo que permitiría ver cambios graduales en sus hábitos alimenticios y físicos sin mayores alteraciones cuando suspenda el medicamento.
Obesidad en aumento
Cuando se habla de las cifras de obesidad, tanto en niños como en adultos, el Dr. Carrasco aclara que a nivel país los números presentados no son exactos.
"Lo que pasa es que se muestran a través de evaluaciones preventivas que sólo representan a una sub-población de todo un universo", comenta.
Como consecuencia de esto es imposible saber con precisión si la obesidad ha aumentado en los últimos años, pero si es válida la alarma que se genera con estas cifras preliminares.
Es por ello que se hace necesario el realizar un fuerte trabajo en la prevención de la obesidad, labor que si bien se viene realizando desde hace varios años por parte del Gobierno, sin resultados.
"Hay un tema educacional, un tema socio-económico y de mercado que ha influido mucho en que no se logren cambiar ciertas conductas", argumenta el médico, a lo que agrega que encuentra muy oportuna la implementación de las 50 medidas para reducir la obesidad por parte del Gobierno.
Esto es importante ya que si no se corrige el problema de la obesidad en Chile, se va a ver un aumento exponencial en enfermedades relacionadas como la diabetes. Además, las medidas deben enfocarse en la infancia para evitar la obesidad en el futuro.
"La obesidad dentro de los primeros cinco años de vida es el factor de mayor riesgo en el adulto. En la medida en la que la obesidad se genera a una edad más tardía dentro de la infancia o adolescencia, el riesgo de obesidad en la adultez va bajando", explica.
Dentro de la infancia los problemas asociados a la obesidad se ven incrementados en dos sentidos. El primero son los problemas metabólicos y enfermedades crónicas, que significan un alto costo de tratamiento.
Los problemas sociales como estigmatización, bullying y aislamiento social, en donde para el niño tienen fuertes consecuencias en el área psicológica y psicoafectiva, haciendo esencial que la detección y prevención de la obesidad sea mucho más precoz en la infancia.