La construcción del pasaje, que tendría uso mixto, permitiría a las personas contar con una vía de acceso alternativo en caso de protestas o tomas de calles.
La construcción del pasaje, que tendría uso mixto, permitiría a las personas contar con una vía de acceso alternativo en caso de protestas o tomas de calles.
Ximena Valenzuela Cifuentes
ximena.valenzuela@diarioconcepcion.cl
Tan antigua como el Barrio Universitario, que data de fines del siglo XIX, es la Escalera de la Paz, creada para mejorar la conectividad de los peatones al lugar, objetivo que hasta ahora se cumple, pues sus más de cien metros de largo y cinco de ancho son altamente transitados por los habitantes del sector.
Sin embargo, el futuro de la Escalera de la Paz es incierto, pues un grupo de vecinos está buscando transformarla en una calle, del ancho de un pasaje, de tal manera, de crear un paso vehicular alternativo al tradicional, ubicado en Beltrán Mathieu, además eliminar del lugar el alto consumo de alcohol y drogas que allí realizarían jóvenes y adolescentes cuando cae la noche.
Roberto Henning, presidente de la Junta de Vecinos Enrique Molina, aseguró que la idea de cambiar la escalera por un pasaje, vehicular – peatonal, se arrastra hace más de seis años y que, de hecho, hace dos años, cuentan con proyecto, realizado por ingenieros y arquitectos, que fue costeado por la Junta de Vecinos para contar con la mejor solución.
La organización vecinal realizó una consulta vecinal, a la que asistieron 123 personas, 85 inscritas en la junta de vecinos y, el resto habitantes del sector, del total de ellas el 67.5% apoyó la idea.
"Se han hecho varias consultas y, por años se ha aprobado porque la escalera se mantiene en malas condiciones, se juntan drogadictos, gente que se junta a tomar y han habido tres intentos de violación y algunos asaltos. Además, cuando se producen protestas y los jóvenes bloquean los accesos quedamos sin forma de ingresar y, más aún, debemos arriesgarnos a sufrir un piedrazo o golpes para pasar".
Sin embargo, la opinión de Hening tiene fuertes detractores, entre quienes viven en el lugar como es el caso de Florentino López, que por 30 años ha vivido al pie de la escalera, pues asegura que la vida pacífica y comunitaria se verá en riesgo si se transforma en una vía de uso vehicular – peatonal.
Aseveró que la medida fue aprobada por una mayoría parcial, principalmente, de vecinos cuyos domicilios no obtienen beneficio alguno con la propuesta y que, por el contrario, generará complicaciones de traslado para un grupo importante de residentes del barrio, entre los que se encuentran estudiantes de la Universidad de Concepción que se ven favorecidos con un acceso directo a la Casa de Estudios o al Hogar universitario.
De hecho, resaltó que el municipio ha realizado mejoras a la escalera, vecinos instalaron barandas para favorecer el uso de adultos mayores y que, a comienzos de año, la Universidad de Concepción hizo pintar los peldaños con colores blanco y negro que reflejan un piano dando un aspecto aún más singular al lugar. Todo ello, según dijo, se iría por la borda con el proyecto.
Explicó que muchos estudiantes, que viven en pensiones, propio de las restricciones que ello implica se reúnen en el lugar para conversar, cantar y reír, pero que se trata de una entretención sana. "No hay delincuencia ni problemas".
Recomendó al municipio no dar curso al proyecto, sino más bien realizar un buen mantenimiento de áreas verdes, reparar los peldaños quebrados de la escala y repavimentar donde sea necesario, pues es una ruta obligada para cientos de personas.
Otra voz en contra fue la de Rodrigo Medina, vecino del barrio, que aseguró que la escalera constituye un rincón urbano que permite salir del ajetreo diario y que el proyecto propuesto por la Junta de Vecinos desplazaría al peatón, sin que exista una justificación clara de la vía.
"La escala es la puerta peatonal a la Agüita de La Perdiz, Barrio Universitario y la Universidad de Concepción. Si se va a intervenir debe haber un proceso de participación que involucre a todos".
Medina agregó que otro punto en contra del proyecto es que no se podría proyectar una calle ahí, que desemboque en Víctor Lamas, pues tiene un eje rápido y de alto tráfico, lo que, a su juicio, sería una trampa mortal.
Un dato a considerar es que pese al reclamo de algunos vecinos, el jefe de la Primera Comisaría de Concepción, comandante Hernán Montoya, informó que no hay denuncias de delitos de connotación social en lo que va corrido de 2016.
Proyecto y dificultades
Henning reconoció que existen detractores de la medida, pero dijo que como ex secretario de la Junta de Vecinos está consciente que será un beneficio para el lugar.
"El proyecto está aprobado por Serviu hace dos años, pero al momento de querer ejecutarlo se presentó un problema con Essbio, pues nos dijo que en ese sector pasa una matriz de agua potable, que alimenta al sector Nonguén y que está a pocos centímetros profundidad y que lo más probable es que se genere una rotura si hacemos trabajos (…) eso nos ha atrasado los trabajos, pero es una piedra de tope que se está resolviendo a través de conversaciones con Essbio".
Henning agregó que la consulta vecinal, aprobada por la mayoría, es un mandato que se debe realizar, ojalá de aquí a fin de año, sobre todo, considerando que al final de la calle Chorrillos se están construyendo alrededor de 500 departamentos, lo que obviamente implicará la necesidad de una vía de acceso. "Entiendo que exista disidencia, pero las personas que participaron de un proceso democrático y deben ajustarse a él".
Arquitectos dicen no
Los detractores no sólo están entre los vecinos, sino que también en el mundo de la arquitectura, que entrega a la escalera una gran importancia, pues es uno de los pocos puntos de la ciudad sólo para peatones y de gran valor para el Barrio Universitario.
El arquitecto y premio nacional de Urbanismo, Sergio Baeriswyl, aseveró que la escalera cobra relevancia, pues es uno de los accesos a los barrios más antiguos de la ciudad, que da especial valor al peatón por sobre los vehículos. "Probablemente sea éste el primer espacio peatonal exclusivo con que contó la ciudad, y que con el paso del tiempo la ha transformado en un lugar singular, con gran identidad funcional y urbana para Barrio Universitario y la ciudad en general".
El arquitecto destacó que la escalera da identidad propia al sector y que en Concepción no hay otro similar.
Generar una vía en su lugar sería un error, según Baeriswyl, pues no cuenta con el ancho suficiente para cumplir con la normativa establecida en la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones, lo que pondría en riesgo la seguridad y funcionalidad de los vecinos.
Además, aseveró que eliminar un espacio eminentemente peatonal contraviene todos preceptos de desarrollo urbano contemporáneo que promueven más espacios para peatones y acotar el rol de los vehículos. "No soluciona ningún problema de tránsito porque no cumple con los estándares para ser calle y, lo que es peor, Concepción perdería un pedazo de su historia".
El profesional dijo que el municipio antes de tomar una decisión de apoyo a la iniciativa vecinal, debe reflexionar en que las ciudades modernas cada día se peatonalizan más, lo que debe llevar a cuidar el espacio, mejorar su mantención contemplando pintura, paisajismo, reparación de gradas y pasamanos, pero ación peatonal que ponga en valor el lugar y mejore la seguridad.
La arquitecto Soledad Garay sostuvo que la escalera formaba parte de un circuito peatonal que subía desde la Alameda, actual Víctor Lamas, hacia el cerro en forma periférica, terminando en la Agüita de La Perdiz.
Pero no sólo era una conexión con el cerro, sino también un sector adecuado para los deportes, "cuando niña nos llevaban del Colegio Alemán a hacer ejercicios en ella todas las semanas".
Más allá de los recuerdos, la arquitecto afirmó que Concepción carece de espacios públicos que aporten situaciones urbanas interesantes. "En su planificación original es un damero (tablero) regular por lo que singularidades urbanas como la Diagonal, calle Exeter, y esta escalera urbana en particular son poco frecuentes y enriquecen la ciudad gracias a intervenciones a la manera de ‘acupuntura urbana’".
Para la profesional la escalera es un espacio muy característico del barrio y potencia un circuito peatonal que permite ir descubriendo el barrio universitario. Por ello, considera que eliminarla seria una mala decisión. Sin embargo comprende que existe un problema vial en el sector que no puede ser resuelto sacrificando los pocos elementos urbanos que entregan identidad y diversidad a un barrio.
Aseveró que se podría potenciar en forma de plaza escalonada, con mejor iluminación y equipamiento. "Hay algunos murales incipientes que podrían ser revitalizados. En conclusión, podría ser un aporte atractivo si se potencia e incluye sendero de ciclovía conectada hacia el barrio universitario".
Falta confirmación de asamblea por escrito
Pedro Venegas, jefe de Secplan de la Municipalidad de Concepción, aseveró que existe un proyecto de pavimentación de la escalera de La Paz, pero que no fue realizado por el municipio, sino que por un particular contratado por la Junta de Vecinos Enrique Molina.
Sin embargo, según explicó, para que el municipio lleve adelante el proyecto, la organización vecinal debía contar con una consulta ciudadana que fuera respaldada por la mayoría de los habitantes del sector. "Ellos efectuaron una asamblea donde dieron a conocer el proyecto y solicitaron el pronunciamiento de la gente y, según lo que me dijeron, la mayoría estaría de acuerdo (…) esa información fue verbal, hasta el momento no se ha entregado al municipio por escrito".
Ahora bien, cuando eso ocurra se podría postular el proyecto a financiamiento de la línea Fril, Fondo Regional de Inversión Local, del Gobierno Regional, "pero a ese proyecto le falta una parte que son las redes de agua potable, por el lugar pasa una matriz y su cambio implica una cantidad de recursos considerables, que en este momento no tienen los vecinos y que Essbio no tiene en sus planes reponerla en el corto plazo".
Afirmó que la pavimentación sólo cumple con las características de un pasaje, tema que fue aprobado hace algún tiempo por el Serviu.