En un trabajo liderado desde el Copas Coastal del Departamento de Oceanografía, junto a especialistas de Ingeniería, se creó localmente un instrumento tecnológico que usualmente se provee desde el extranjero. Tras la recepción de la estructura viene un proceso de sensorización para luego instalar y probar en el océano.
Bajo el radiante sol y frente al océano en Dichato, las ciencias del mar de la Universidad de Concepción (UdeC) siguen consolidando su posición líder tras más de 50 décadas de trayectoria al protagonizar un nuevo logro para la investigación y desarrollo local y nacional: la llegada y presentación de una boya oceanográfica diseñada y armada de forma íntegra en el país.
El evento se dio este 13 de diciembre al alero de un trabajo liderado desde el Centro de Investigación Oceanográfica (Copas) Coastal del Departamento de Oceanografía junto con investigadores de la Facultad de Ingeniería, se materializó en el entorno de la Estación de Biología Marina de la casa de estudios en la localidad costera de la comuna de Tomé, y supone un avance científico y tecnológico para Chile, porque suele depender de tecnologías e insumos desarrollados y provistos desde el extranjero.
Se trata de un primer hito al que le seguirán varios otros de cara al armado y futura operación de esta boya, y que suma potentes capacidades que serán clave para aportar al Instituto Océanos que recientemente presentó la UdeC para fortalecer un liderazgo internacional en las ciencias marinas reconocido en el Ranking Académico de las Universidades del Mundo, conocido como Ranking de Shanghái.
Registro y transmisión de datos en tiempo real sobre variables oceanográficas y meteorológicas, clave para diversidad de investigaciones en temáticas relevantes sobre las que se requiere tener más conocimiento y comprensión como para sistemas de observación y alertas que dependen de información precisa y oportuna, es lo que permitiría el funcionamiento de esta boya una vez esté ensamblada con todas sus estructuras, instalada y operativa en el mar en un periodo próximo.
“Esta boya tiene dimensiones de 5 y 20 metros de largo, con un diámetro del flotador de 2 metros 20. Su capacidad de carga es de 180 kilos, lo que significa que todo el cargamento que se adicione a la boya puede sumar 980 kilos”, precisó Carlos medina, académico del Departamento de Ingeniería Mecánica de la UdeC y líder del trabajo desde el punto de vista del desarrollo, a cargo de la gestión del diseño, fabricación y armado de la boya.
Las características de dimensiones y flotabilidad materializan un diseño pensado para funcionar de forma óptima en altamar bajo muy intensas condiciones oceanográficas y ambientales, como fuertes oleaje y corrientes.
Actualmente la boya oceanográfica está en estado inicial como estructura o armazón, a la que le siguen la integración de distintas tecnologías para que pueda operar y tomar los datos en el océano.
“Posteriormente toca sensorizar la boya; en la parte superior de la estructura se colocan sensores atmosféricos, en la caja va toda la comunicación y sistemas de grabación de datos, y bajo la línea de flotación van todos los sensores oceanográficos para diferentes aplicaciones”, y tomar los datos en el océano. “Posteriormente toca sensorizar la boya; en la parte superior de la estructura se colocan sensores atmosféricos, en la caja va toda la comunicación y sistemas de grabación de datos, y bajo la línea de flotación van todos los sensores oceanográficos para diferentes aplicaciones”, expuso Marcos Avendaño, ingeniero de desarrollo del Copas Coastal.
Entonces, estará lista para ubicarse en el mar e iniciar un periodo para probar efectivamente su funcionamiento y seguir en relación con las aplicaciones de su uso para consolidar en el gran hito que es avanzar en el desarrollo de tecnología hecha en Chile.
Aumentar las capacidades del Copas, y así de Biobío y Chile, significa esta boya recién llegada a la Estación de Biología Marina.
Ante ello Carlos Medina aclaró que “el Centro lo que hacía era adquirir una boya y luego poner
todas los instrumentos para hacer las mediciones”.
Ahora se avanzó hacia desarrollar localmente una boya que, una vez operativa, se añadirá al
sistema que ya posee el centro con otros instrumentos similares que están midiendo en distintas
zonas para avanzar en registro de datos e información relevante para investigaciones y decisiones
de impacto económico y social.
Al respecto, Marcos Avendaño relevó que “las aplicaciones van de acuerdo a las necesidades del
proyecto” para el que se use la boya. Lo clave es que siendo una región y un país costero, con
soberanía y economía que se sustenta importantemente en el mar, es esencial poseer capacidades
en el océano y avanzar en investigación, conocimiento y monitoreo oceanográfico.
La boya oceanográfica que recientemente recibió el Copas Coastal en dependencias de la Estación de Biología Marina de la UdeC en Dichato, en cuyas inmediaciones se probaría en su funcionamiento en una etapa inicial posterior a su armado completo, es la segunda que desarrolla el centro de excelencia, expuso Diego Narváez, académico de Oceanografía UdeC e investigador del Copas Coastal y líder del proyecto “CDOM Portuario, sistema de monitoreo y pronóstico oceanográfico y meteorológico aplicado a operaciones portuarias” que se ejecuta desde 2022 en el marco del concurso Desafíos Públicos del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación.
El desarrollo de este instrumento se dio justamente al alero de esta iniciativa y materializa avances hacia la meta de investigar para generar tanto conocimiento como soluciones tecnológicas e innovación de impacto para abordar necesidades de la sociedad regional y nacional que se planteó el Copas Coastal que se ejecuta desde 2021, continuando una historia de dos décadas que partió desde la ciencia básica y llevó a proponer un proyecto con una nueva unidad dedicada a esos retos y objetivos: MOTOR (MOdelación, Tecnología, Outreach y tRansferencia).
Y así se aborda una necesidad tanto para el centro e investigación local como para instituciones, industria y país cuyo maritorio es tres veces la superficie del territorio con su costa de más 6 mil kilómetros en línea recta, pero que largamente ha dependido de capacidades que provee el extranjero, lo que se traduce en mayores costos de adquisición o tiempos y complicaciones ante problemas como fallas de sistemas versus lo local.
“Entre comprar en el extranjero una boya como la que hemos hecho hablamos del 50% de diferencia en costos”, apuntó Narváez como ejemplo. También se optimiza las respuestas y siempre se van potenciando los conocimientos y capacidades técnicas y humanas disponibles en tanto se avanza en los desarrollos y así a la meta de que realmente llegue a disponerse e instalarse para influir en distintos fines.
“La boya es una plataforma donde colocas sensores oceanográficos que toman información que se transmite y cómo se usan esos datos da el carácter de investigación, operacional o de interés público”, expuso el investigador. Y afirmó que lo ideal es que “sean los dos: científicos en el sentido de que los datos que se generen nos sirvan para contestar preguntas científicas de la zona costera y también entregarlos datos de una forma que sirva para la toma de decisiones”.
En este sentido se detuvo en el uso en el proyecto que lidera con una boya operando en el Puerto de Coronel para entregar información sobre variables como magnitud de viento y oleaje, que permite definir avance o cierre de operaciones portuarias de distinta índole.
“Hay sensores de temperatura que pueden servir para los pescadores. Generalmente, los recursos que pescan están asociados a ciertas condiciones de temperatura y eso puede dar alguna indicación de cambio u orientar donde está la presa o recurso”, expuso.
También se podría tomar la decisión de cerrar playas y balnearios si hay riesgos por las condiciones oceanográficas.
Son algunos ejemplos que demuestran el potencial de impacto económico y social de estos instrumentos, lo que refuerza la importancia de poder desarrollarlos localmente para su uso local en primer lugar, en lo que avanzan desde la investigación del Copas, acumulando experiencias, conocimientos y herramientas.