Las playas son cercanas a la comunidad local, teniendo gran valor cultural como también ecológico, por lo que es un deber cuidarlas de la nociva contaminación que las mismas personas provocan.
Por Anaís Hinayado y Natalia Quiero
La cercanía a la costa del Pacífico Sur es una de las reconocidas características del Concepción Metropolitano, con diversas comunas costeras, que también hay en la provincia de Arauco, lo que se traduce en la existencia de una gran variedad de playas que ofrecen apetecidos destinos turísticos para aprovechar en instancias que van desde paseos de un día o tarde hasta periodos vacacionales más prolongados.
Una visita que se da durante todo el año y que de forma evidente aumenta en primavera-verano, mientras más sube la temperatura lo hace la concentración de turistas. Y, también, la basura que queda: la popularidad ha traído como consecuencia que balnearios y paisajes se vean perjudicados, tanto de manera estética como a nivel ambiental y ecológico.
Por eso se requiere del compromiso social integral en el cuidado y conservación del espacio marino-costero, del océano y las playas, que compete a todos los actores, desde autoridades al crucial rol de la sociedad civil y turistas.
Y esa es la consciencia y acción que se requiere permanente e impulsa a su desarrollo el Día Internacional de Limpieza de Playas que se celebra cada 26 de septiembre, del que participan más de 120 países que incluyen a Chile y así también convoca al Biobío.
Y a nivel nacional y local la comunidad ha jugado un rol importante durante el último tiempo en relación a la limpieza de playas y la efeméride, sumándose a participar de las actividades que se organizan en dicho contexto y que están a cargo de la Dirección General del Territorio Marítimo y de Marina Mercante (Directemar) de la Armada de Chile.
Es así que en la conmemoración de 2023 participaron 10.131 voluntarios a lo largo del país, recogiendo 98.176 kilos de basura, según los datos disponibles en la página oficial de Directemar.
En el caso de Concepción Metropolitano, una de las organizaciones que destaca por su activismo en el cuidado de las playas es la Fundación Bandada. Junto con la ayuda de una mesa de trabajo compuesta por el Municipio de Talcahuano, la Armada y la Seremi de Medio Ambiente (MMA) han logrado incentivar a la comunidad a participar en distintas jornadas de limpieza.
La más reciente, aprovechando el contexto del Día Internacional de la Limpieza de Playas, fue citada en la zona de Isla Rocuant en Talcahuano. Y fue la segunda del mes recién pasado de septiembre, después de la realizada para el Día de las Aves Playeras.
El director de la Fundación Bandada, Felipe Jara, explicó que se han concentrado en Isla Rocuant ya que entre las décadas de 1970 y 1980 estuvo funcionando como vertedero, lo cual lo transformó en un sector profundamente contaminado. “Producto de las marejadas de los últimos años se ha desparramado basura en toda la bahía de Concepción, así que ha sido un trabajo de nunca acabar”, manifestó.
Otro ejemplo local el rol activo está en la Municipalidad de Lota, donde la limpieza no se limita a fechas específicas.
Noemí Quinchavil, administradora municipal, contó que a lo largo de 2024 ya han tenido tres jornadas de limpieza de playas. La primera tuvo lugar en la conocida Playa Blanca y se realizó en colaboración con el Liceo Comercial Eduardo Frei Montalva y el local ZonaZero. Luego se llevó a cabo una acción en el sector Muelle con apoyo de la Escuela Isaías Guevara. La más reciente fue el 27 de septiembre en Playa Colcura, en conjunto a la Armada, la Escuela Isaías Guevara y la Escuela Valle de Colcura. En las tres instancias ha habido respaldo de la Dirección de Medio Ambiente, Aseo y Ornato, del programa ProEmpleo y de la empresa Starco que facilitó contenedores para la recolección de residuos.
Estas actividades se dan en un contexto de un plan municipal en Lota: “La Municipalidad implementa un sistema de limpieza y cuidado de las playas que opera durante todo el año, pero con mayor intensidad entre los meses de agosto y abril, coincidiendo con la temporada alta de turismo. Para esto, se cuenta con cuadrillas permanentes asignadas a las playas Colcura y Playa Blanca, encargadas de mantenerlas limpias de residuos”, explicó Quinchavil.
Y destacó que este tipo de operativos para mantener las playas limpias también busca fortalecer la colaboración entre instituciones locales, la comunidad y los turistas, junto con la consciencia ambiental.
Municipalidad de Lota
La evidencia y la experiencia demuestran con claridad que el mayor porcentaje de la basura que se puede encontrar en el océano global y las costas alrededor de todo el mundo ha sido generada por el ser humano, que con su actividad ha contaminado los ecosistemas y afectado a la biodiversidad, llegando los residuos a los ambientes tanto de forma intencional como accidental por efecto de procesos naturales como los vientos y las corrientes marinas.
Según la evaluación a la actividad de limpieza de las playas que se realizó en Chile durante la iniciativa de 2023, Directemar cuantificó que los desechos más encontrados en las costas de Chile son las colillas de cigarro y plásticos. Y la contaminación plástica ha generado uno de los mayores problemas ambientales, estando presente y dañando ecosistemas tanto terrestres como marinos, debido a la muy larga resistencia y vida del material, porque puede tardar varios siglos en degradarse.
Estos datos se condicen con los de la investigación “Científicos ciudadanos estudian la basura en la playa a lo largo de 12.000 km de la costa este del Pacífico: una línea base para el Tratado Internacional del Plástico”, que se publicó a fines de 2023 en la revista Internacional Marine Pollution Bolletin, y que contó con la participación de la Universidad de Concepción (UdeC) a través del doctor Mauricio Urbina.
El trabajo buscó ahondar en la contaminación y basura a lo largo de la costa este del Pacífico, pasando por 9 países desde México por el norte hasta Chile en el sur, integrando tres playas del Biobío, dos en Coronel y una en Tomé, permitiendo descubrir patrones en la suciedad de los lugares: el plástico compuso la mayor concentración con 63% de la basura hallada, mientras el segundo tipo más abundante fueron las colillas de cigarro con 10% de prevalencia.
En dicho contexto fue que Mauricio Urbina, académico de la Facultad de Ciencias Naturales y Oceanográficas de UdeC, enfatizó que la presencia de quienes visitan las playas debe tender a ser cada vez menos invasiva. “El ser humano debería ser capaz de integrarse a su entorno sin causar un efecto en la biodiversidad o en otra especie”, sostuvo.
Un tema de importancia vital. El también investigador del Instituto Milenio de Oceanografía (IMO) de la UdeC destacó lo interesante y abundante en especies marinas que pueden ser las bahías del Gran Concepción: en todas playas y costa del Biobío hay flora y fauna que observar, y también cuidar y conservar, como la hay en el mar.
Por eso, el doctor Urbina advirtió que el hecho de que las industrias se encuentren en un sector cercano a las playas es bastante nocivo para los ecosistemas marinos-costeros. En este sentido, el académico observó que actividades industriales como la extracción de carbón, las forestales y la portuaria ya han significado un fuerte impacto ambiental, que se exacerba al añadir el factor de la contaminación por desechos dejados tras el turismo.
Un ejemplo específico de una especie que ha sido afectada con las alteraciones ambientales es el Pilpil. Felipe Jara expuso que es una de las razones por la que se ha vuelto el símbolo de la “Fundación Bandada”. Esta ave, la cual nidifica en diversas playas alrededor de Chile, ha tenido una baja considerable en sus índices reproductivos, menos del 10% de éxito, debido a la constante contaminación de su hábitat.
Por eso es un acto importante que los ciudadanos no sigan contribuyendo a este impacto problemático y que impacten en la solución.
En virtud de ello Noemí Quinchavil explicó los principales errores de los visitantes de las playas: “Los turistas suelen cometer algunos descuidos recurrentes. Entre los más comunes están no llevar consigo bolsas o recipientes donde depositar la basura, lo que provoca que dejen latas, botellas plásticas y de vidrio, envoltorios de alimentos y otros desechos directamente en la playa”, detalló.
“Esta falta de conciencia ambiental contribuye a la contaminación y afecta tanto el ecosistema como la experiencia de otros visitantes”, aseveró, por lo que es importante desarrollar la consciencia que lleve a actuar con responsabilidad y tomar los resguardos que permitan evitar errores, cuidar a las playas y promover el bienestar de la naturaleza y las personas.