El Proyecto Asociativo Regional de un icónico programa del Ministerio de Ciencia, que busca promover habilidades científicas y transversales de forma temprana para mejorar la educación y cultura, inició una nueva fase que culmina en 2024. La meta es llegar a 500 establecimientos, con foco en los más vulnerables y rurales.
El Proyecto Asociativo Regional (PAR) Explora Biobío está en un nuevo ciclo dentro de sus más de dos décadas de trayectoria. Y para iniciarlo oficialmente durante esta semana presentó su agenda y al Consejo Asesor que apoyará el desarrollo del trabajo el próximo periodo.
Son dos años de ejecución que culminan en diciembre de 2024 los que tiene el PAR Explora Biobío, que financia el Programa Explora de la División Ciencia y Sociedad del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (CTCI), y que la Universidad de Concepción (UdeC) sigue liderando tras adjudicarse su implementación que realizará a través de su Centro Interactivo de Ciencias, Artes y Tecnologías (Cicat) que está en Coronel.
Es que la UdeC ha encabezado el trabajo local de Explora, enfocado en trabajar con escolares de todos los niveles, desde que el programa se creó en 1995 y cuyos proyectos evolucionaron hasta llegar a los PAR hace cerca de una década con mayores montos asignados y metas, relató Mónica Badilla, directora del PAR Explora Biobío.
Un total de 16 entidades relacionadas con distintas disciplinas y quehaceres integran al Consejo Asesor, representados por profesionales que el pasado 28 de junio participaron en la firma simbólica de su conformación.
La instancia considera a instituciones públicas como las Seremías de CTCI y Educación, organizaciones de la sociedad civil como TEA Time, y la academia a través de estamentos y centros de investigación UdeC como el Instituto Milenio de Oceanografía (IMO), el Centro de Investigación Oceanográfica Copas Coastal, el Centro Interdisciplinario para la Investigación Acuícola (Incar), el Centro de Recursos Hídricos para la Agricultura y la Minería (Chriam), el Centro Eula, el Departamento de Astronomía, la Unidad de Desarrollo Tecnológico, el Centro de Investigación de Polímeros Avanzados (CIPA), además de distintas facultades.
Y Mónica Badilla relevó el rol del Consejo Asesor para avanzar en el trabajo del PAR Explora, del que precisó que su gran objetivo es “socializar y fortalecer las competencias CTCI en comunidades escolares en comunas de toda la Región del Biobío”.
Porque el equipo de especialistas integra las diversas áreas del saber, desde ciencias naturales y exactas hasta sociales, humanidades y artes. Por ende, puede hacer aportes cruciales para encauzar e implementar las diversas actividades del proyecto local que consideran acciones como divulgar y acercar ciencia y conocimiento en forma lúdica desde la primera infancia, hasta promover la investigación e innovación escolar.
Todas las actividades se desarrollan en base a principios como inclusión, equidad de género, descentralización y sustentabilidad. Sobre ello, la directora enfatizó el foco en llegar a los establecimientos más vulnerables y de zonas aisladas, donde a veces sólo trabaja un docente, con la misión de aportar en la igualdad de oportunidades para comunidades escolares distribuidas por el vasto territorio regional.
En este sentido, explicó que “una gran diferencia con concursos anteriores es que este proyecto Explora trabaja sólo en comunidad escolar. Antes también trabajaba con público general”.
El trabajo efectivo del nuevo periodo del PAR Explora Biobío inicia este segundo semestre y entre las metas concretas está impactar a 500 colegios o liceos subvencionados y públicos de las 33 comunas de la región, llegando a miles de estudiantes.
Para este 2023 la meta es alcanzar a 248 establecimientos y el 10% de estos debe tener alto índice de vulnerabilidad y 30% emplazarse en zonas aisladas, desarrollando acciones en todas las comunas.
Grandes metas que son tan desafiantes como enormemente valiosas, así como toda la trayectoria del proyecto en Biobío. “El PAR Explora es bastante valioso porque es una forma en la que llegamos con la ciencia de todos los ámbitos del conocimiento y a las 33 comunas, sobre todo este año con foco en establecimientos municipales y rurales, muchos unidocentes, donde normalmente no se ha llegado con este tipo de actividades”, manifestó Sofía Valenzuela, seremi de CTCI para la Macrozona Centro Sur a la que pertenece la Región del Biobío.
“Por eso esperamos tener pocas actividades en la ciudad de Concepción y muchas en otras comunas de las provincias de Arauco, Biobío y la de Concepción. Porque es necesario llegar con la ciencia a todos. Y en este despliegue, del próximo año y medio que queda del proyecto, como Seremía estamos disponibles a acompañar al equipo Explora en todo lo que requieran”, sostuvo.
$290 millones anuales es el fondo con el que cuenta el PAR Explora Biobío en este nuevo periodo de ejecución.
El PAR Explora Biobío desarrolla iniciativas que alcanzan a todas las etapas de la educación escolar, desde el nivel de párvulos a la enseñanza media (foto cedida por Comunicaciones PAR Explora Biobío).
Los objetivos y actividades para 2023-2024 generan que el programa local de Explora se distinga a nivel nacional.
De hecho, el coordinador ejecutivo del PAR, Cristian Espinoza, aseguró que “Explora Biobío es uno de los proyectos que tiene una de las metas más grandes de cobertura de colegios y el desafío de llegar a 33 comunas; además es el proyecto asociativo regional con más actividades para desarrollar en el país”.
Hay iniciativas para cada etapa escolar, desde primera infancia hasta cuarto medio, y acciones con distintos niveles de interacción entre expertos con docentes y escolares. Pero, todas concebidas desde el modelo de competencias de Explora: “todas las actividades desarrollan competencias transversales como el trabajo en equipo y competencias científicas donde la fundamental es actuar con curiosidad, es decir, predisposición positiva a descubrir el entorno”.
Con la batería de actividades se configura una ruta formativa. Al respecto, Espinoza sostuvo que “la idea es que entren estudiantes y educadores con predisposición positiva a descubrir los métodos de la ciencia y la tecnología, y salgan personas que tengan una trayectoria científica y desarrolladas las competencias científicas con el sentido de tomar decisiones en base a los métodos que utiliza la ciencia”.
Eso significa que el propósito de Explora no es necesariamente acercar la ciencia a escolares para incentivar vocaciones científicas para elegir una carrera profesional en CTCI; lo principal es fortalecer habilidades científicas y transversales como el pensamiento crítico para integrarlo a sus opiniones y decisiones en todo ámbito. “Queremos que las personas utilicen la ciencia como una forma de resolver problemáticas de su vida cotidiana o entorno laboral”, afirmó Espinoza, lo que parte en la escuela y trasciende a una carrera o trabajo.
La actividad transversal, que tiene el mayor recorrido dentro de la educación, es la Iniciativa de Investigación e Innovación Escolar (IIE), que parte en primero básico hasta cuarto medio.
“IIE busca que un profesor con un grupo de estudiantes formulen una propuesta y desarrollen una proyecto de investigación o innovación”, contó. Para el proceso cuentan con acompañamiento de Explora y sus asesores científicos.
Con IIE el principal propósito es que “derribar la creencia de que la ciencia es compleja y pertenece a algunos y que tanto docentes como estudiantes sientan que todos podemos desarrollarla”, enfatizó.
IIE tuvo su convocatoria abierta en junio para postular los clubes, de los que este 2023 acogerá a 60 de establecimientos de las 33 comunas regionales.
Hasta el 19 de julio está abierta la postulación para el ciclo 2023 del Programa de Indagación para Primeras Edades (PIPE), que seleccionará a 60 profesionales de la región. Educadores y técnicos en educación parvularia y/o diferencial que trabajan con infantes en niveles Medio y Transición de establecimientos con reconocimiento del Ministerio de Educación son el público objetivo de PIPE, que busca desarrollar herramientas para incentivar competencias y cultura científica desde la primera infancia.
Cristian Espinoza explicó que PIPE, que como estrategia y kit de materiales se creó en 2020 por un equipo del Cicat, incluye actividades divididas en las áreas de ciencias naturales, ciencias sociales y tecnología, alineadas con los objetivos de aprendizaje del currículo de la Educación Parvularia.
“En PIPE se introducen las competencias científicas y se abordan cada una de las actividades a través del juego que se expresa con la metodología del enfoque de indagación, que son los primeros pasos para el método científico”, aclaró.
Actividades locales
Explora Biobío también tiene actividades locales, creadas desde y para la Región, y con las que amplifica su impacto.
Una es Eureka, diseñada por profesionales del Cicat, que se enfoca en el primer ciclo básico para promover habilidades transversales del modelo Explora con una serie de dinámicas que buscan crear un clima propicio para el aprendizaje. Esta finaliza su admisión la tercera semana de julio.
Además se creó un álbum de actividades para este nuevo ciclo y pensado para que docentes apliquen en el aula para motivar la interacción con y entre escolares. La meta es imprimir 10 mil productos y distribuir en establecimientos de las 33 comunas.
Retos próximos
En novedades y retos para el nuevo periodo está retomar y fortalecer la red de profesores para aumentar el impacto de Explora Biobío. Cristian Espinoza contó que la idea es tener un encargado comunal en cada una de las 33 comunas para que participen de la red en que se abordarán acciones como actualizar contenidos.
Además, destacó que “para PIPE se están creando 10 canciones asociadas a las actividades para que educadores usen para llegar con otro soporte a niños y niñas”.
Por último se detuvo en que establecimientos cuyos docentes no postularon o no adjudicaron cupos para IIE, PIPE o materiales, no necesariamente se quedarán ajenos al quehacer de Explora que también considera llegar a más colegios y liceos con charlas de científicos y especialistas del Consejo Asesor. Así pueden involucrarse y conocer al programa, además de fortalecer competencias y áreas que pudieran incentivar próximas postulaciones.