Instancia se desarrolló en Tomé junto al municipio local y abordó el uso de la IA en áreas como salud y agricultura.
Democratizar el conocimiento y acercarlo de manera entretenida y cercana a los territorios fue el objetivo del conversatorio Ciencia en tu comuna que se realizó en Tomé. El encuentro, organizado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, el municipio de la comuna costera y universidades locales acercó el concepto de inteligencia artificial, sus implicancias y los desafíos en el desarrollo de esta, a la comunidad tomecina.
Además de la ministra de la cartera, Aisén Etcheverry Escudero, también participó el académico de la Universidad de Concepción y especialista en Inteligencia Artificial en educación y computación afectiva, Dr. Pedro Salcedo Lagos. En representación de la Universidad del Bío-Bío asistió la Dra. Carola Figueroa Flores, experta en aplicación de inteligencia artificial en salud, agricultura y medioambiente.
El representante de la Universidad Católica de la Santísima Concepción fue el Dr. Yasmany Prieto Hernández, especialista en inteligencia artificial aplicada a redes de comunicación.
Antes de iniciar el conversatorio, la Secretaria de Estado explicó que estos encuentros “buscamos que todos y cada uno de nosotros -independiente de si somos dueñas de casa, mecánicos, médicos o abogados- podamos empoderarnos y usar la tecnología como una herramienta, y no padecer ante la tecnología como algo que nos pasa. En la medida que podamos asumir eso, nuestro futuro será mejor, nuestro país y la democracia van a funcionar mejor y nuestras vidas también”.
El primero en tomar la palabra fue el académico de la Facultad de Educación de la UdeC, Dr. Pedro Salcedo, miembro del equipo que trabaja en establecer una estrategia institucional en torno al uso de las IA, quien habló de los límites de la inteligencia artificial y el potencial en contextos educativos.
El Dr. Salcedo dijo que “la inteligencia artificial, desde que inició, ha intentado tomar la expertiz que tienen los profesores y poder replicarla en los sistemas”. A partir de esa premisa, el académico UdeC enfatizó que si bien es posible completar esa tarea, la diferencia entre una máquina y una persona es que esta última modula su trabajo en función de las emociones suyas y las de la persona a la que se enfrenta.
“El profesor real no sólo tiene conocimiento acerca de su especialidad, sino que también tiene conocimiento de las emociones, y ellas son una de las principales variables que utiliza dentro de aula para motivar, pero esto estaba lejos de poder ser medido desde la inteligencia artificial; pero, en la medida que ha ido avanzando la tecnología, podemos medir las expresiones faciales, el tono de voz, el lenguaje, el ritmo cardiaco, lo que permite a las máquina interpretar las emociones de las personas”, explicó.
Luego, los demás expositores/as contaron cómo se acercaron a la inteligencia artificial y cómo ésta aporta al trabajo que realizan desde sus áreas del conocimiento.
Tras las exposiciones de los invitados y las invitadas, la Ministra Etcheverry ofreció al público la posibilidad de plantear preguntas. La mayoría provino de estudiantes y profesores de colegios de la zona, quienes plantearon sus dudas y miedos respecto del uso de la inteligencia artificial en el plano cotidiano. El reemplazo de personas por máquinas, el uso de las IA para mejorar la educación o los desafíos para motivar a estudiantes a mantener la actividad física, fueron algunos de los temas planteados.
Al respecto, la académica de la UCSC planteó que “este tipo de encuentros es precisamente para esto, para atacar la desinformación y conversar acerca de los miedos en el uso de la IA”.
La profesional enfatizó que los sistemas no son emocionales y, aunque sí aprenden a reconocer emociones porque están entrenados para eso, no reemplazan a las personas. Añadió que “Una de las bases de las IA es que vienen a resolver problemas del ser humano y una de las herramientas para evitar los miedos y desinformación es mantener encuentros como estos”.
Con relación a los miedos por pérdidas de trabajo y empleo generados a partir de la incorporación de nuevas tecnologías en el campo laboral, la Dra. Flores explicó que “así como se han ido perdiendo algunos oficios a lo largo de la historia, también han aparecido nuevas áreas, nuevas profesiones, nuevos oficios. Por ejemplo, con el Chat GPT, es importante gestionar lo que se genera a través de la herramienta y se tienen que verificar citas bibliográficas. Esto no es la verdad absoluta, deben existir personas que fiscalicen el uso de la herramienta”.
En la misma línea, el académico de la Universidad de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, Dr. Yasmany Prieto Hernández, La inteligencia artificial, al menos en el estado en que está ahora, es una herramienta. Y toda herramienta es tan beneficiosa y perjudicial según el uso que nosotros le demos. Se habló del uso militar o para persuadir a las personas, y eso es un problema que tal vez haya que resolverlo con más tecnología y más ciencia. Vivimos en un mundo globalizado en el que si no tomamos el camino de la tecnología, otros lo van a hacer y serán más productivos y más eficientes; por tanto, tenemos que verla como una oportunidad de mejorar nuestra vida, nuestros procesos productivos”.