UBB lidera proyecto para promover la refacción térmica de viviendas

Fomentar la innovación basada en ciencias e introducir nuevas herramientas para abordar la necesidad de descontaminar el ambiente local y desarrollar el mercado del reacondicionamiento térmico son focos de este trabajo de dos años de plazo.

En 2020 comenzó a regir el Plan de Descontaminación Atmosférica (PDA) en el Concepción Metropolitano. Este instrumento establece medidas para prevenir y mitigar la contaminación ambiental con los daños a la salud de las personas y planeta que causa, mediante la regulación del uso de las principales fuentes contaminantes.

La calefacción es una, como también una necesidad para el confort térmico en la época otoño-invierno. Ante ello, el PDA busca mejorar uso y calidad de leña y estufas, y aumentar la eficiencia térmica en viviendas, considerando el reacondicionamiento para adecuarlas.

“Se estima que las viviendas reacondicionadas podrían llegar a demandar la mitad de leña en calefacción, por ejemplo, lo que impactaría de forma muy importante en la reducción de la contaminación”, aseveró el doctor Ariel Bobadilla, director del Centro de Investigación en Tecnologías de la Construcción (CITEC) de la Universidad del Bío-Bío (UBB). Una realidad en la que hay una necesidad que cubrir y una posibilidad que aprovechar: se necesita reducir la contaminación y reacondicionar las viviendas; se puede promover el desarrollo de la industria y mercado del reacondicionamiento térmico de viviendas en el Gran Concepción.

Y Bobadilla está convencido que investigación e innovación tienen mucho que aportar, lo que sustenta a la “Plataforma Biobío de Refacción Térmica de Edificios”, proyecto que dirige y es financiado por el Gobierno Regional del Biobío a través del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FIC-R).

El proyecto

La iniciativa de dos años de ejecución, que lleva un cuarto del plazo en curso, “busca introducir la digitalización, las tecnologías de la información y la innovación basada en ciencias para hacer de las necesidades del reacondicionamiento térmico de viviendas en nuestra región un negocio exitoso”, relevó el investigador.

El propósito es configurarse como puente que conduzca a mejorar las oportunidades de trabajo y desarrollo económico local con enfoque en las Mipymes, pero utiliza como base y motor al conocimiento y nuevas herramientas.

Para ello, una de las aristas es crear nuevas soluciones para el reacondicionamiento térmico de viviendas mejor ajustadas a las necesidades actuales.

Además, ejecutará programas de formación y entrenamiento para MiPymes, y de educación a autoridades y comunidad general.

También va a crear un registro especial de empresas acreditadas que sean proveedoras de servicios de refacción, materiales y elementos para esos fines, en conjunto con la Seremi de Vivienda y Urbanismo del Biobío. Y construirá una plataforma informática de gestión y servicios de refacción térmica de viviendas a nivel regional, que será mantenida en el tiempo por el CITEC UBB.

Ariel Bobadilla resaltó que en lo que va del plazo de ejecución “se ha logrado construir la línea base con las características constructivas, arquitectónicas y energéticas del parque de viviendas en las 33 comunas de la Región del Biobío”.

Hacia el final del proyecto se espera que haya propiciado el desarrollo de 2.500 empleos.

Experiencia de base

Este proyecto FIC-R se sostiene en la vasta experiencia del CITEC UBB en materia de construcción de viviendas, tanto en investigación y desarrollo como en transferencia. Además, a realiza de manera habitual pericias técnicas para mediar en conflictos asociados a la calidad de la construcción habitacional, generalmente por encargo del Estado.

Ariel Bobadilla relevó que el trabajo “ha dado lugar a nuevos sistemas constructivos, nuevos materiales y nuevos estándares de construcción, entre otros” y que “de las necesidades de desarrollo y resultado de pericias se infiere que el parque de viviendas adolece de protección térmica, lo que justifica plenamente la necesidad de reacondicionarlo térmicamente”.

Por evaluaciones hechas por el Centro en la zona centro sur en la última década son tres condiciones las mínimas fundamentales que deben cumplir las obras de reacondicionamiento térmico de viviendas.

Bobadilla mencionó que “la primera, y tal vez más importante, es que la solución se ajuste correctamente a las características higrotérmicas de la localidad. En la Región del Biobío se distinguen al menos tres zonas higrotérmicas a considerar para reducir riesgos de fallas higrotérmicas”. Las manchas de humedad son una de estas fallas.

En segundo lugar la solución se debe ajustar a las reales necesidades y características de la vivienda en particular, por lo que debe realizarse un diagnóstico antes de elegir.

Por último, la refacción se debe resolver de la manera más costo-eficiente posible. “Se requieren métodos cada vez menos invasivos, ocupar menos tiempo en las viviendas y cumplir al mejor nivel posible con los objetivos de la obra de refacción térmica”, cerró.