Un proyecto que lidera la Unidad de Telemedicina y en asociación con la Ucsc ha dado vida al pionero CRT Biobío. De la mano de las nuevas tecnologías acortará brechas de acceso a la atención.
La Región del Biobío tiene al primer Centro Regional de Telemedicina y Telesalud (CRT) de Chile; espacio físico que sustentará un trabajo virtual para mejorar la atención sanitaria y calidad de vida de miles de personas.
Porque ayer 6 de abril se inauguró el CRT Biobío, iniciativa que lidera la Unidad de Telemedicina (Telmed) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Concepción (UdeC), que dirige la doctora Angélica Avendaño desde que se creó en 2005, en asociación con la Universidad Católica de la Santísima Concepción (Ucsc).
Es un proyecto que se materializó con recursos del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FIC-R) 2021 del Gobierno Regional (Gore) del Biobío. Son más de $1.800 millones de financiamiento para desplegar un trabajo de tres años, que inició formalmente en 2022, que busca impactar el bienestar social y desarrollo local.
Es que la doctora Avendaño resaltó como objetivos “contribuir a fortalecer las capacidades instaladas en la Región y mejorar el acceso, la cobertura y la oportunidad de atención sanitaria utilizando estrategias de telemedicina y telesalud”.
El propósito es usar las tecnologías para acortar esas diferencias y distancias territoriales que se vuelven crudas brechas sociales para el acceso oportuno y especializado que desfavorecen la salud y calidad de vida de miles habitantes de localidades alejadas de grandes centros urbanos y recintos más complejos.
Como Isla Santa María, Isla Mocha, Tucapel o Menque; localidades a las que beneficiará el CRT Biobío que funcionará en la Telmed UdeC. Gracias al FIC-R esta unidad se refaccionó con una inversión de $117 millones, para establecer modernas instalaciones y equipos que conocieron las autoridades que participaron en la inauguración, desde donde se concretará el vínculo entre especialistas de las casas de estudio con equipos y usuarios de centros de las localidades, ofreciendo diversas atenciones remotas.
Además, la académica relevó que desde este espacio se impulsará la formación de capital humano y la I+D+i+e (investigación, desarrollo, innovación y emprendimiento) a través de un Laboratorio de Telesalud donde se podrán pilotar y validar soluciones en un ambiente controlado.
El laboratorio favorece al sistema desde la perspectiva de su competitividad y al progreso local, desde donde también se podrán aumentar las herramientas y oportunidades disponibles en pos de la salud y calidad de vida de la comunidad regional.
Por la realidad local, lo que se ha visto y las proyecciones que permiten las evidencias es que las expectativas del gran potencial de impacto del CRT Biobío son altas.
“En la Región del Biobío tenemos grandes brechas”, advirtió Iván Valenzuela, jefe de Fomento e Industria del Gore Biobío, como las de acceso salud por la diversidad geográfica y de realidades comunitarias que hay dentro del gran territorio regional. En ese contexto, el apoyo a la implementación del CRT Biobío se ha dado bajo la convicción de que “las tecnologías llegaron para quedarse y deben ponerse a disposición de los diversos usuarios y dar respuestas”.
Para el rector de la UdeC, doctor Carlos Saavedra, la puesta en marcha del inédito CRT Biobío es ejemplo palpable del poder de las nuevas tecnologías y de la real preocupación que hay desde la casa de estudios por “mejorar las oportunidades en salud y construir una calidad de vida digna para todas las personas de la Región”. Aporte en la solución de problemas reales de la comunidad local que definió como “la vocación de la UdeC desde su fundación; la UdeC nace como un anhelo y respuesta a las necesidades de la ciudad”.
En la misma línea, el doctor Cristhian Mellado, rector de la Ucsc relevó “los aportes del Gore y la sinergia que se genera entre dos casas de estudio, la Ucsc y la UdeC, que se unen para poner al servicio de la región las capacidades académicas y también la experiencia en telemedicina que tenemos. Eso va en directo beneficio de los habitantes y permite disminuir las diferencias que tenemos en salud”.
Beneficio que celebró y resaltó Jaime Veloso, alcalde de Tucapel, donde crucial ha sido el abordaje –primero como piloto- en gastroenterología y endoscopías, con usuarios con años en listas de espera que se han reducido y próximamente serán más acotadas. “Si no buscamos alternativas ingeniosas como la que está presentando el Gore con las universidades, lógicamente, vamos a desalentar un montón de expectativas de gente que está en nuestras comunas esperando una solución, una tranquilidad frente a un problema de salud que le afecta”, manifestó.
La inauguración del CRT Biobío se vivió como hito final de un arduo primer año de ejecución. Porque Angélica Avendaño relevó que han sido varios retos, acciones y logros de estos meses al alero de un proyecto que se sustenta en cuatro ejes de trabajo: clínico-asistencial; educación; I+D+i+e y un Observatorio de Salud Digital.
Porque, sostuvo, hay un enfoque sistémico crucial; no basta con la existencia de la tecnología, se requiere que haya capital humano capaz para integrarla y usarla adecuadamente así como una cultura de usuarios conscientes de su existencia y aporte; además de que es clave generar conocimientos y herramientas que para que se utilicen e impacten deben transferirse.
En la antesala de la inauguración la académica socializó los 10 hitos que han tenido, partiendo por el lanzamiento del proyecto en 2022.
Entonces, comenzó un trabajo con los cuatro Servicios de Salud de la región (Concepción, Talcahuano, Biobío y Arauco). Los SS son representados en un comité que participa en reuniones, conversaciones y propuestas para colaborar en la toma de decisiones como la elección de las localidades con mayores necesidades para llevar el proyecto.
Esto permitió iniciar el proceso de identificar las necesidades de capacitación en el personal de salud que trabaja en recintos en esas comunidades. El cuarto hito fue la capacitación con instancias que impactaron a cerca de 500 a estudiantes, profesionales y técnicos.
Posteriormente vino el reto de movilizar al sistema de salud regional para que se pudiera implementar la telemedicina en zonas aisladas y con más necesidades, y acorde a estas en particular.
Luego se instalaron antenas satelitales en los territorios para mejorar la conectividad para los procesos de telemedicina y telesalud. Comenzó la implementación en Isla Santa María que depende de Coronel, siguió en Tucapel (Biobío), avanzó a Isla Mocha (de Lebu) y culminó en Menque (de Tomé).
Con el recurso humano capacitado y testeos a las tecnologías realizados, el séptimo logro fue implementar estrategias de telemedicina según necesidades levantadas en cada zona como teleconsultorías, telesalud familiar, telenefrología o telegastroenterología.
Otro hito fue la implementación de la Sala de Telesalud Comunitaria en el Cesfam de Tucapel.
Más recientemente se habilitó el Laboratorio de Telesalud en la Unidad de Telmed UdeC y el último hito es el Observatorio de Salud Digital pronto a inaugurarse en la Ucsc. Este permitirá recolectar, analizar y disponer información válida sobre el uso de telemedicina y telesalud para la toma de decisiones.
Sobre lo que viene en etapas próximas, Angélica Avendaño adelantó que se comenzará a trabajar con Hualqui, Santa Juana, Punta Lavapié y Santa Bárbara. Y reconoció que proyecta que no sean las últimas impactadas con el CRT y que su mayor anhelo es que se logren formar nodos en toda la región para extender el quehacer e impacto.
Esperanza que, igual que el proyecto, se sustenta en la experticia que la doctora Avendaño junto a su equipo poseen, de la mano de las casi dos décadas de Telmed UdeC con importante liderazgo y participación en iniciativas y aporte en formación de capital humano.
Un avance sustancial vino con la pandemia de Covid-19. Desde sus inicios vislumbraron una necesidad, que devino en oportunidad, de levantar la plataforma “Telecovid” que en 2021 evolucionó al soporte camposclinicosvirtuales.cl. “Con toda esta trayectoria de conocimiento y redes de colaboración e investigación, con la evidencia de que efectivamente esta es una herramienta muy potente, logramos adjudicar el proyecto del CRT Biobío”, manifestó.
Y con “potente” no quiere decir que es la solución a toda brecha que hay en materia de salud o para cualquier caso, sino que es segura y efectiva para brindar atenciones oportunas y de alta calidad en muchos casos en que la presencialidad dificulta el acceso y la virtualidad; muy en sintonía con el lema “Salud para todos” del Día Mundial de la Salud que se celebra hoy (7 de abril).
Por ejemplo, una atención virtual puede evitar muchas largas esperas que se dan al estar en listas cuando los especialistas son pocos y están concentrados en grandes ciudades o complejos traslados de horas para llegar al recinto, lo que afecta la salud y calidad de vida.
“La evidencia científica y la experiencia nos ha enseñado que las herramientas de telemedicina y telesalud tienen que complementar la atención presencial. No es una mejor que otra, sino que tiene que estar disponible para que los equipos de salud puedan recurrir a estas herramientas en el caso que lo requiera”, aseveró Avendaño. Esa es su convicción, el paradigma con que trabajan en el CRT para impregnarlo en la región.