Estudio UdeC muestra que falla geológica desplazó un río del sur
16 de Abril 2021 | Publicado por: Natalia Quiero
Resultado fue publicado en una revista del grupo editorial Nature y se obtuvo en el marco de la investigación doctoral de Luis Astudillo, en un trabajo que por primera vez estimó tasa de desplazamiento de la Zona de Falla Liquiñe-Ofqui.
En la revista Scientific Reports, del grupo editorial Nature, recientemente se publicó un estudio que permitió estimar, por primera vez, la tasa de desplazamiento milenaria para la Zona de Falla Liquiñe-Ofqui (Zflo), en los Andes del Sur, y que su actividad sísmica ha desplazado hacia el norte al río Liquiñe (su cañón), ubicado en la Región de Los Ríos, en los últimos 10 mil años. Es una de las más importantes fallas de tipo cortical del sur nacional.
Se trata de una intensiva investigación de tres años que ha realizado en el marco de su tesis doctoral el geólogo Luis Astudillo, estudiante del Programa de Doctorado en Ciencias Geológicas de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad de Concepción (UdeC), autor principal del artículo, quien releva que “estimar la tasa de desplazamiento a escala de miles de años ayuda a evaluar el potencial de las fallas para producir eventos sísmicos”. Es que a escala geológica miles de años son la historia reciente y, justamente, su propósito ha sido estudiar la deformación asociada a las fallas corticales y principalmente la Zflo a dicha escala para establecer la amenaza sísmica que podrían representar.
El doctor Joaquín Cortés, académico de la UdeC, estuvo a cargo de guiar la tesis doctoral y precisa que “el río Liquiñe sufre una deflexión (desplazamiento) casi en 90° al enfrentar la falla del mismo nombre” y que el estudio estimó que “la falla se mueve 19 milímetros por año, lo cual permite caracterizarla como una falla de alto nivel de actividad, lo que puede significar la ocurrencia de terremotos de magnitud moderada y/o desplazamientos asísmicos a lo largo de la falla”. En este sentido, Astudillo apunta que “no hay sismicidad para la estructura reportada en los últimos 500 años, alcance del registro en Chile”.
Implicancias e interrogante
La investigación se ha realizado en el marco del Núcleo Milenio Cyclo, del que participan académicos de la UdeC, que entre sus líneas de investigación considera una que busca entender la respuesta al proceso de subducción (hundimiento de una placa litosférica bajo el borde otra placa), directamente asociado a la actividad en fallas corticales, por lo que calcular la tasa de desplazamiento de la Zflo tendría implicancias importantes y para el desarrollo de futuras investigaciones , reconoce Astudillo. Las zonas de subducción son una de las principales fuentes de riesgo sísmico del planeta y en estas se han registrado los sismos más devastadores para Chile, como el de Valdivia en 1960 o el 27/F de 2010.
Los investigadores del centro de excelencia Daniel Melnick y Julius Jara, también autores del artículo científico, hace años habían reconocido la Zflo y registrado datos usados en el estudio junto a nueva información recopilada en terreno entre 2018 y 2019. Esta fue obtenida y procesada mediante avanzadas técnicas y metodologías científicas como la de topografía digital de alta resolución. Luis Astudillo explica que permite filtrar puntos de vegetación y obtener un modelo digital del terreno sin árboles, permitiendo identificar rasgos en la forma del paisaje que podrían asociarse a fallas y quedar ocultos en la vegetación cuya abundancia caracteriza al ambiente estudiado -y al sur de Chile- complejizando investigar las fallas corticales; más si existen pocas evidencias de movimiento reciente.
“¿Por qué no tiembla si se mueve tan rápido?”, plantea el investigador como la interrogante que el hallazgo abre. Una de las hipótesis del grupo es que “la estructura está acomodando el desplazamiento de manera asísmica, es decir, se mueve sin producir sismicidad, fenómeno que se llama reptación”, comenta, pero son procesos que no se pueden comprobar con el tipo de estudio que hicieron y cree pertinente emprender uno que resuelva esa inquietud.
Y también seguir ahondando en estas fallas geológicas y su actividad que, eventualmente, podría implicar riesgos que deberían evaluarse y considerarse, porque un “sismo mayor en estas fallas, incluso, produce más daño que uno de subducción, porque se producen a menor profundidad, entonces la energía del sismo se disipa muy poco antes de llegar a la superficie”, cierra.