Recientemente se detectó en el Hospital Regional de Concepción un caso de intoxicación por anís estrellado en un lactante menor (menos de 6 meses) de la Región.
Inquietud motora marcada del menor, irritabilidad, llanto frecuente, hinchazón abdominal, alteraciones en el sueño, marcados episodios de sobresalto sobre todo al dormir y movimientos anormales de los ojos fueron parte de los síntomas que evidenciaron los padres.
En la evaluación clínica neurológica presencial se evidenció hipotonía (deficiente control de la cabeza) y retraso del desarrollo motor, signos que encendieron las alarmas en el Hospital Guillermo Grant que detectó ingesta continua por más de dos meses de anís estrellado que habría causado síntomas.
La neuróloga pediátrica y epilectóloga Carmen Paz Pérez, del Servicio de Pediatría del Regional, dijo que el uso más frecuente, extendido entre la población es para ‘aliviar’ los cólicos del lactante en los tres primeros meses de vida.
“En la literatura se han publicado decenas de reportes de intoxicación por anís estrellado, y entre los síntomas a destacar, están la aparición de irritabilidad, llanto persistente, hiperexcitabilidad o reacción de sobresalto exagerada, somnolencia, movimientos anormales de los ojos o extremidades, temblores, crisis epilépticas, aumento o disminución del tono muscular, coloración azulada de piel o mucosas (cianosis), pausas respiratorias, vómitos, distensión o hinchazón abdominal e incluso, la muerte. En general, los estudios de laboratorio sanguíneos y de imágenes son normales, aunque se han descrito casos con falla hepática”, complementó la especialista.
En el caso del menor intoxicado los síntomas desaparecieron al dejar de administrarle anís.
“La recomendación más importante en este sentido es eliminar el uso del anís estrellado en todo recién nacido, lactante y niño”, dijo la pediatra.
En 2017, el Instituto de Salud Pública (ISP) difundió una alerta informativa de farmacovigilancia nacional, por el alto riesgo de intoxicación por anís estrellado, recomendando no usarlo.